Conozca algunas de las mejores playas de Cuba, y disfrute los encantos que esconden sus finísimas arenas blancas, sus cálidas aguas turquesa y unos atardeceres de lujo, siempre desde las mejores instalaciones.

Cuba es, sin duda, uno de los destinos turísticos más atractivos del Caribe. Su riqueza natural la convierte en las más interesantes de las Antillas mayores y en una plaza natural ideal para quienes buscan realizar el tour de sus sueños a playas paradisíacas y de encanto inigualable.

Soleados, seguros, espectaculares, así son los balnearios del archipiélago cubano. La Isla cuenta con más de 300 kilómetros de playas naturales, de fina arena y aguas limpias, cálidas y tranquilas, que son una tentación para halagar el cuerpo y la mente bajo el sol del trópico. A esta variedad de playas se le suma la cayería norte del archipiélago, con lugares seductores donde prima la belleza y la tranquilidad de las Islas soñadas.

Entre las playas más importantes de Cuba podemos mencionar, de Occidente a Oriente: María la Gorda y Cayo Levisa en Pinar del Río; Playas del Este en La Habana; Varadero en Matanzas; playas de la cayería norte de Villa Clara en los cayos de Santa María, Ensenachos y Las Brujas; Playa Ancón en Trinidad, Rancho Luna en Cienfuegos. Cayo Coco y Cayo Guillermo en Jardines del Rey, Playa Santa Lucía en Camagüey, Guardalavaca, Esmeralda y Pesquero en Holguín; Marea del Portillo en Granma y las Playas de Baconao en Santiago de Cuba. Todos excelentes lugares para realizar un tour.

Balneario de Varadero

Sin discusión, la playa de Varadero es el más universal, conocido y visitado de los destinos de sol y playa en Cuba.  En uno de los destinos más populares y en franco auge hotelero, sobresale, además de por sus encantos naturales, por la variada y excelente oferta hotelera y extra-hotelera que propone al visitante.

Así, si decide llegarse por esta paradisiaca franja de playa del litoral norte de Cuba le sugerimos no dejar de disfrutar de algunos de sus escenarios submarinos, pues cuenta con importante centro internacional de buceo, esperar el atardecer tendido en la arena y, si Varadero lo atrapa, y decide pernoctar en esta ciudad Balneario, no se pierda su vida nocturna, con espacios donde se presentan las mejores orquestas del país y donde radican las discotecas más renombradas: no deje de pasarse por La Rumba.

En todos los balnearios cubanos se puede disfrutar de condiciones excepcionales para la práctica de deportes náuticos.

El golf tiene un espacio exclusivo en el Varadero Golf Club con un formidable campo de 18 hoyos.  

Los Hoteles y las casas de alquiler

En cada uno de los balnearios cubanos podrá disfrutar de un servicio hotelero de lujo, donde podrá de seguro encontrar respuesta a cada una de sus exigencias. Prestigiosas instalaciones cinco estrellas con servicio Royalty y oferta todo incluido, con un personal altamente especializado, hasta servicio de organización de eventos, recepciones, bodas y luna de miel. Esto y más puede usted encontrar a su disposición en cada uno de ellos. 

¿Sugerencias? Si su estándar es alto y desea mimarse un poco, no lamentará pasar un fin de semana de lujo en el Paradisus Varadero, categoría 5 Estrellas Ultra Todo Incluido Royal Service, la más alta de la compañía Melia-Hotels International.

También los hoteles en los cayos cubanos, la mayoría de reciente apertura, le ofrecen una posibilidad de ultra confort, sobre todo si su intención es dedicarse unas vacaciones aislado de la ajetreada dinámica de la vida moderna, relajado y en completa privacidad.   

Las ofertas de alojamientos en casas particulares es una de más buscadas por los turistas que nos visitan cada año. Al precio económico de estas casas de alquiler para vacaciones en la playa, se suma el confort y los servicios personalizados.

Cuba se ubica, dentro del Caribe insular, como un destino privilegiado. El turismo de playa y sol es una de sus cartas de presentación más fuertes y que la han logrado insertar en no pocos mercados, como lo que es, un paraíso tropical bañado por el mar caribe, que usted no debe perderse. ¿No cree?